Desde mi rincón existencial: tristezas que deambulan por mi cabeza : CRISIS

La humanidad atraviesa uno de sus peores momentos existenciales y se encuentra en grave peligro, muy delicada, con severas fases absurdas que nos están conduciendo a una crueldad feroz, autodestructiva y letal. La humanidad es un calvario, padecemos tremendos dolores y sufrimientos morales y espirituales, sumidos en una angustia existencial de no saber nada con respecto a nosotras mismas y a la realidad que nos rodea.

Veo hombres y mujeres consumidos, perdidos, dormidos, cegados por no ver más allá de sus propias limitaciones, llevando una vida totalmente vacía, sometidos al fastidio habitual y asfixiante de la rutina blasfema, que oxida la capacidad cerebral de poder adquirir mayor cordura, viviendo con una vida sin brillo, repitiendo siempre las mismas cosas, de manera automatizada, hastiados, aburridos, agotados por no saber como seguir con el sufrimiento que nos produce el simple hecho de estar parado aquí, sobre la existencia misma.

La tristeza desértica, producida por la insatisfacción personal se extiende como un virus, y vivimos sumidas en la negrura de no encontrarnos a nosotras mismos, y andamos de aquí para allá, siguiendo a todas los que dicen saber y así, somos utilizadas por el poder, ya sea religioso o político. Es bien claro la SEPARACIÓN que producen los dogmas religiosos y los ideales políticos, dividiendo al ser humano en miles de pequeños fragmentos mentales, y todas separadas defendiendo con uñas y dientes a la verdad que cada una cree tener, y nos volvemos violentas al hacerlo, contribuyendo con más violencia social.

Si todos aquellos profetas, cambios y maestros espirituales predicaban el AMOR, no entiendo porque nosotras vivimos todas separadas, fraccionadas en diversas religiones, unidas en el ODIO racial y religioso. Y escribiendo sin ningún tipo de compromiso o fragmentación política y religiosa; creo que nos encontramos encaminadas hacia la RUINA, que no será total porque quedarán algunos de nosotras para continuar con la especie; pero la TRISTEZA permanecerá grabado en la memoria de quienes hayan podido salvar su vida, y el recuerdo del espanto se transmitirá de generación en generación para que la locura total no vuelva a repetirse jamás.

Desde el silencio de mi corazón puedo decir que mi alma suspira de amor, porque siento la verdad en él, como existe en todos los corazones de cada una de ustedes; y por creer en lo que yo creo, no significa que no pueda creer en las enseñanzas de Jesús o sentir los mensajes de Buda; o de cada uno de todos los grandes maestros espirituales de la humanidad, voy aprendiendo a ser yo misma, a no seguir a nadie mas que a mí misma, porque ellos me enseñaron que la VERDAD es un camino personal y que anida en cada corazón.

El AMOR supera todas las barreras raciales, sociales, religiosas y sexuales, es una FUERZA DIVINA que no conoce de fronteras, porque además todas nosotras somos DESPRENDIMIENTOS DIVINOS. Y no puedo condenar a nadie porque ELLOS me enseñaron a amar al prójimo. Solamente me limito a expresar todas las palabras que llegan a mi sangre, sin ánimo de ofender a nadie, al contrario, siempre busco la unidad.

La humanidad se encuentra en una EMERGENCIA UNIVERSAL, y a todos los líderes del mundo entero, sean políticos, religiosos, agnósticos o ateos, les pido SABIDURÍA, que despierten de una buena vez para que comiencen a utilizar el poder de la INTELIGENCIA, que es un DON que todas tenemos solo que……………. que muy pocas la utilizamos.

Si TODAS las religiones del mundo se UNIERAN, con el poder que ellas poseen, el universo se transformaría de una manera impactante para todas nosotras; ya no habría mas divisiones religiosas, y TODOS podríamos aprender las enseñazas de TODOS, y cada una podrá sentir el brillo del amor en otra, y otra sentirá lo mismo, y todos entraríamos en un CAMINO de comprensión propia, con una MENTE ABIERTA y sin fanatismos destructivos.

Cada ser humano puede transformarse a si misma y encontrar AQUELLO que tanto busca, que existe y fluye en la realidad de la misma VIDA. Todas las religiones son bellas, con palabras maravillosas, y si cada una transmite un mensaje de AMOR, entonces ¿por qué odiamos al que profesa otra religión? No odiemos, vivamos todas unidas, en paz, utilizando la inteligencia, y no continuemos con la estupidez del prejuicio racial, político religioso y sexual.

Los tiempos se acortan, y nosotras, pequeñas bestias humanas, no hemos aprendido casi nada y seguimos tan brutales como antes, discutiendo ALGO que no tiene discusión, que además no se puede explicar con simples palabras porque ESO se manifiesta con todas las realidades posibles. Cada una de nosotros tendrá que indagar profundamente hacia la intimidad de SU corazón, y realizar un profundo EXÁMEN DE CONCIENCIA, para saber en que estado se encuentra la realidad de su propia vida.

Con el corazón.