miércoles, diciembre 31

El Derecho Humano jamas publicado.


Tijuana BC Dic 008.   El Derecho Humano jamás publicado.

 

 

 

 

El nuevo año nace cada primero de enero por obra y gracia de los senadores del imperio romano, que un buen día decidieron romper la tradición que mandaba celebrar el año nuevo en el comienzo de la primavera.

Y la cuenta de los años de la era cristiana proviene de otro capricho: un buen día, el papa de Roma decidió poner fecha al nacimiento de Jesús, aunque nadie sabe cuándo nació.

El tiempo se burla de los límites que le inventamos para creernos el cuento de que él nos obedece; solo que el mundo entero festeja y teme esta frontera.

Mientras el tiempo continúa su caminata a lo largo de la eternidad y del misterio.

La verdad no hay quien resista: en una fecha así, por injusta que sea, cualquiera siente la tentación de preguntarse cómo será el tiempo que será.

Y vaya una a saber cómo será.

Aunque no podemos adivinar el tiempo que será, sí que tenemos, al menos, el derecho de imaginar el que queremos que sea.

En 1948 y en 1976, las Naciones Unidas proclamaron extensas listas de derechos humanos; solo que la enorme mayoría de la humanidad no tiene más que el derecho de ver, oír y callar.

 

¿Qué tal si empezamos a ejercer el Derecho Humano jamás publicado?

 El derecho de soñar

¿Qué tal si alucinamos por un momento?

Vamos a hundir los ojos más allá de la perversidad, para adivinar otro mundo posible: el aire estará limpio de todo veneno que no venga de los miedos humanos y de las humanas pasiones; en las calles, los autos serán aplastados por los perros; la gente no será manejada por el vehículo, ni será programada por la computadora, ni será comprada por el supermercado, ni será mirada por el televisor; el televisor dejará de ser el miembro más importante de la familia, y será tratado como la plancha o la lavadora.

La gente trabajará para vivir, en lugar de vivir para trabajar; se agregará a los códigos penales el delito de estupidez, que cometen quienes viven por tener o por ganar, en vez de vivir por vivir nada mas, como canta el pájaro sin saber que canta y como juega el niño sin saber que juega.

En ningún país irán presos los jóvenes que se niegan a cumplir el servicio militar, sino los que quieran cumplirlo; los economistas no llamarán nivel de vida al nivel de consumo, ni llamarán calidad de vida a la cantidad de cosas; los cocineros no creerán que a las langostas les encanta que las hiervan vivas; los historiadores no creerán que a los países les encanta ser invadidos; los políticos no creerán que a los pobres les encanta comer promesas; la formalidad se dejará de creer que es una virtud, y nadie tomará en serio a nadie que no sea capaz de reír.; la muerte y el dinero perderán sus poderes, y no por fallecimiento o por fortuna se convertirá el delincuente en honorable señor.  

Nadie será considerado héroe ni tonto por hacer lo que cree justo en lugar de hacer lo que más le conviene; el mundo ya no estará en guerra contra los pobres, sino contra la pobreza, y la industria militar no tendrá más remedio que declararse en quiebra.

La comida no será una mercancía, ni la comunicación un negocio, porque la comida y la comunicación son derechos humanos; nadie morirá de hambre, porque nadie morirá de indigestión; los niños de la calle no serán tratados como si fueran basura, porque no habrá niños de la calle; los niños ricos no serán tratados como si fueran dinero, porque no habrá niños ricos.

La educación no será el franquicia de quienes puedan pagarla; la policía no será la maldición de quienes no puedan comprarla; la justicia y la libertad, hermanas siamesas condenadas a vivir separadas, volverán a juntarse, espalda contra espalda.

La Santa Madre Iglesia corregirá las equivocaciones de las tablas de Moisés, y el sexto mandamiento ordenará festejar el cuerpo; la Iglesia también dictará otro mandamiento, que se le había olvidado a Dios: "Amarás a la naturaleza, de la que formas parte"; serán reforestados los desiertos del mundo y los desiertos del alma; los desesperados serán esperados y los perdidos serán encontrados, porque ellos son los que se desesperaron de tanto esperar y los que se perdieron de tanto buscar; seremos paisanos y contemporáneos de todos los que tengan voluntad de justicia y voluntad de belleza, hayan nacido donde hayan nacido y hayan vivido cuando hayan vivido, sin importar las fronteras del mapa o del tiempo; la perfección seguirá siendo el aburrido privilegio de los dioses.

Solo que en este mundo cerrado y jodido, cada noche será vivida como si fuera la última y cada día como si fuera el primero.

Andrea Guadalupe.

 

 


                                              Andrea Guadalupe.

                Tijuana BC. México. Tierra que abraza siempre al regreso, que cobija entre latidos  
                                            sumergidos en una busqueda natural.

                   Desde mi rincón existencial, donde el  sol nace al poniente.      

 
 




Acceso muy fácil al uso compartido de fotos con Fotos de Windows Live™. Arrastrar y colocar

No hay comentarios.: