sábado, junio 24

Caricias o Barrotes de Prision


Tijuana BC  Jun 006. Caricias o Barrotes de Prisión.

 

Por ser demasiado abierto, amoldable, por dejarse engañar por propios y ajenos, porque nunca discute, porque acepta fórmulas inaceptables, por estar siempre de parte de todos, correctos y obtusos. ; Por eso y por muchas cosas más, la culpa la tiene el lenguaje.

Es mejor culparle a él, si no nuestros oídos y nuestras bocas serían los grandes responsables de discursos indeterminadas  como: "grupos minoritarios", "diversidad sexual ", "seres anormales", "degenerad@s", "maricones" o el nuevo y sarcástico "pervertid@s sexuales" ¿qué quieren decir exactamente con esto?

. Hemos asistido a la degeneración de las palabras. Resulta indecente que no nos rechinen los oídos ante tal violencia despreciativa

Si nos atenemos al sentido original de las palabras, si comprendiéramos que la elección de unas en lugar de otras responde a una finalidad concreta, elegida siempre por una razón emocional  en origen indicadora de criterios, el orden social sería eso, un orden en lugar de un desorden. Si esa unión constante entre término y contenido se aplicase a los géneros, no sexos biológicos, el mundo estaría asistiendo a un nuevo despertar social e igualitario. No podemos olvidar que la humanidad y su  movimiento social  nacieron bajo la señal "Libertad, igualdad, Fraternidad,”. Solo que……….., por lo visto, esas palabras debían de pesar poco porque se las llevó el viento.

Si las diferencias dejasen de ser "diferencias" para convertirse en inexistentes, si las palabras para el definirnos tuvieran  como objetivo el integrarnos  y el respeto que como seres humanos merecemos, las palabras tendrían un sentido real y no el de un papel sanitario usado..

Ahí nace el problema de las palabras, quien tiene el poder sobre ellas, su difusión, les da la forma de las letras sobre vaho en el cristal, escribir una palabra que cuando se evapora el vaho desaparece. El problema es que no deja de estar ahí, cuando vuelve el vaho surgen de nuevo. No se puede hablar por hablar. Parece que el rebuscamiento vence al sentido cuando el respeto desaparece.

Es fácil culpar las  palabras y no a nuestros oídos que no se alertan cada vez que alguien muestra machismo, homopfobia y segregación, o a nuestras bocas, cada día peor educadas. No nos sentimos violados cada vez que perjudican nuestro estilo de vida  para convertirlo en un arma. Lo maravilloso del lenguaje, su capacidad de cambiar y de amoldarse, se convierte en un arma de doble filo que casi siempre decidimos agarrar desde la empuñadura. Si de verdad queremos construir un futuro mejor, debemos comenzar por el lenguaje. Cuidar el sentido de lo que decimos porque una palabra puede sentirse como caricia o como dardo, como mano tendida o como barrotes de prisión    Andrea Gpe.



                           Andrea Guadalupe.

                               TEL.. 01- 664-50-27-457.

                         Tijuana Baja California Norte. Mexico

                   DESDE MI RINCON EXISTENCIAL,

hesa540828@hotmail.com           agluna200@àyahoo.com.mmx

http://andreaguadalupe.blogspot.com

www.disforiadegenero.org

 

No hay comentarios.: