Hay apariciones que no sabemos apreciar,
por que nos negamos a creerlas de valor,
Ahora que la oscuridad haga suya mi habitación,
Ahora que la luz se esconda, voy a gritar tu nombre en vano
Mientras observo como se desvanece el amor en tu piel.
No abras los ojos, memoriza lo que pronto no vas a ver,
Recuerda el mar, la reposada blancura de su orilla,
El hueco en el corazón, que deja el abandono
De tu improvisado amante
Aquellos labios que se negaron a dar un beso
Su cuerpo que nunca fue tuyo
Y los brazos abiertos de tu criatura
Que corre donde tu estas
Que corre con ansias hacia ti
Por que no te ha visto todo el día.
Somos ingratas con quien nos quiere
Con quienes nos amaron un arrebatado día
Allá va la sonrisa que jamás devolvimos
La insinuación que confundimos con amabilidad
El perfume que nos inunda la piel,
Allá van, desvanecidas, llevadas por el viento
Esas pequeñas cosas que juramos conservar en la memoria
Me han contado de los reinos donde la luz
Es un eterno atardecer
Donde los ojos, son lagos entristecidos
Donde los pájaros vuelan a ras de suelo
Muy cerca de los corazones que tiemblan
No se dice lo que no se hace
Para que hablar del viaje siempre pospuesto
De la noche amorosa jamás amanecida
Vamos a estar una piel en el cuerpo de la otra,
Sin que la luz del sol se asome por la ventana
Al amor lo rodean las palabras
Como a los ojos la imaginación
Yo quisiera acostarme con alguien,
Aunque no tuviera un rostro definido
Que no me hablara de su pasado,
Que yo no hablara sino con las manos
Que el silencioso ruido de sus labios
Habite en mi desnuda habitación
Solo se ama una vez en la vida
Aunque me esfuerce en la esperanza
De repetir con diferentes cuerpos.
Andrea Guadalupe.
DESDE MI RINCON EXISTENCIAL,
hesa540828@hotmail.com agluna200@àyahoo.com.mx
http://andreaguadalupe.blogspot.com
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