Desde mi rincón existencial: tristezas que deambulan por mi cabeza : Giros interminables.

Tijuana BC Enero 008. Giros interminables.

Cuando murió, subió presurosa al cielo mientras escuchaba cantos angelicales, armoniosos trompetas.

Solo que no sabia que tomaba impulso para salir disparada a lo más profundo del infierno y los olvidos.

Por eso había fiesta en el paraíso.

Su pasado estaba tan vació, como hueco su futuro.

Sin embargo no había otra cosa que guardara tanto como su pasado, que le hacia ante las demás, ser tan repudiada como en el presente.

¿Hacia donde van las nubes?, por que yo voy en dirección contraria.

¿Hacia donde fluye el río?, por que yo voy a parajes solitarios.

Y nado y me siento en una roca.

Y en estas penurias fue que descubrí un pozo sin fondo y tuve que derramar tiempo sobre el, como si fuera barro, basura, desperdicios, ascos, horrores, despertares dolorosos, condenas, trabas, pestilencias, fastidios, decepciones, temores del alma, engendros del espíritu extraviado, tristezas, cansancio, excrementos, enfermedades, vidas como papel arrugado, ………………..y a esa tarea me dedico, solo que, ……………………..el pozo no tiene fondo.

Siguiendo el camino, parece una recta interminable, solo que cuando te elevas a las alturas, descubres que se curva ligeramente.

Cuando me quite la mascara, nada resulto ser como esperaba, pues aparte de que nadie resulto ser quien pretendía ser, nadie quería ser quien era, y anhelaban la mascara del vecino.

¿Dónde estas estas tu cuando no nos vemos?

A veces, me da por pensar que no existes, que eres un espejismo, que solo hace aparición cuando creo que nos encontraremos.

Siempre acabo creyendo que eres real, eso dicen las calles.

No quiero escuchar, forzosamente lo hago, y esos comentarios me afectan.

A veces, la paso mal, yo creo que existes, como no existo yo.

Por que seriamos tan solo el pensamiento de otro ser más importante que tú y yo.

Así que decidí vivir en libertad por una sentencia ajena a mi, fue el día en que te encontré.

En medio de aquel sueño era difícil despertar, no por el deleite de los sentidos, si debido a lo contrario, a la terrible angustia y desequilibrio que producía.

Eso sucedió la primera vez que me embarque en busca de algo cierto.

Es mejor no pensar sobre esas cuestiones, dijo el espíritu celeste.

Era el sol persiguiendo a la luna.

Era un papel persiguiendo a la pluma, y mil garabatos que su blanco corrompía.

Era la vida retando al aburrimiento.

Y un beso lento en tu boca moría.

Era la muerte llegando inadecuada.

Que me alejaba contenta mientras me despedía.

Pienso en ti, se podría decir que estoy enamorada, solo que …………………………….

El otro día, me vi caminando por un enorme y árido desierto.

Cual fue mi confusión, descubrí que estaba en lo más profundo de tus lagunas mentales, ahí donde almacenas todo el material a expulsar de tu memoria para siempre. Andrea Gpe.