Desde mi rincón existencial: tristezas que deambulan por mi cabeza : Por estas razones...............(Humor negro)

Tijuana BC Marzo 008. Por estas razones…………………… (Humor negro)

¿Conocen ustedes el proverbio chino aquel que dice: Siéntate a la puerta de tu casa para ver pasar el cadáver de tu enemigo?

Últimamente algunas personas se han dirigido a mí telefónicamente: Si, hogar dulce hogar de Andrea Gpe, planta baja, ¿Con quien desea hablar?

O por medio de correos electrónicos, intrigadas por que nunca me han visto sentada a la puerta de la casa, esperando ver pasar los cadáveres de mis enemigos.

Y me preguntan a qué se debe mi extraño proceder.

Al respecto, contesto que algunas veces he estado a punto de hacerlo, solo que una serie de razones y circunstancias me han impedido llevarlo a la práctica.

En primer lugar, por que vivo en un fraccionamiento de interés social, soy totalmente Infonavit.

La avenida que lleva a Colinas del Descanso, en Cueros de Venado, calle que conduce al panteón, se encuentra en la parte posterior y mas alta del fraccionamiento, y se forman ahí unas corrientes de aire que, en cuanto una se descuida, agarra una pulmonía doble que no te la quita toda la penicilina que exista en esta frontera.

Y precisamente se trata de ver pasar cadáveres sentada en la puerta, y no de que me vean pasar a mi convertida en uno de ellos.

Y por mucho que me lo propongo, me es imposible subir corriendo a la Avenida García que comunica con Cueros de Venado, para ver pasar los cadáveres que llevan a Colinas del Descanso.

Sean enemigos o ciudadanos que me son totalmente indiferentes.

Y además, por que el departamento lo pago puntualmente cada mes, aparte la luz, el gas, el servicio de teléfono y televisión por cable.

Por lo que seria una soberana tontería pasarme la vida sentada en la puerta arriesgando que mis vecinos piensen que no tengo que hacer, y que los malandrines me consideren competencia.

Prefiero estar adentro, cómodamente sentada, con una taza de café recién hecho, viendo algunas telenovelas, que son más divertidas que los cortejos fúnebres.

Me receto un programa de Dr. House, del cual el difunto desafortunadamente no alcanzo a recibir atención, pues de otra manera, le habrían ordenado una tomografía para descartar lupus, placas de tórax, una punción lumbar, perfil tiroideo, los generales sudamericanos de sangre y orina, y una botana para matar el hambre.

Además por que sospecho que mis enemigos donde quiera que estos se ubiquen, no van a disponer en sus testamentos que los congelen a la hora de su muerte para traerlos a Tijuana, y particularmente a Colinas del Descanso, nada mas para darme gusto.

Y además, de tanto verme sentada a la puerta de mi casa, esperando que pasen cadáveres, no faltara quien me acuse de necrofilia.

Y si pasa el cadáver de quien nunca conocí en vida, automáticamente la gente lo va a catalogar como mi enemigo.

Por todas estas razones, y otras mas que se me ocurrirían si me pusiera a pensar en ese tema, me abstengo de cumplir con el proverbio chino.

Que me sugiere sentarme a la puerta de la casa para ver pasar el cadáver del enemigo.

Andrea Gpe.