Desde mi rincón existencial: tristezas que deambulan por mi cabeza : JOSE KALIMBA ANGEL.

Tijuana B C N Sábado 25 febrero 005.

El avión de pasajeros acababa de despegar y se elevaba apenas cuando de pronto se escucho por el sistema de sonido la voz alterada del piloto que gritaba Cuidado, cuidado, ¡OH, Dios, y ahora que voy a hacer.

Angustiado José Kalimba Ángel, espero lo peor en ese momento, sin embargo volvió a escuchar la voz del piloto ya calmado Disculpen ustedes damas y caballeros, quedo abierto el sistema de comunicación de la cabina, por eso escucharon ustedes mis palabras aparentemente de alarma, solo que no hay peligro, Grite por que la señorita azafata tropezó y me hecho encima una taza de café, Vieran ustedes como quedo la parte delantera de mi pantalón.

José kalimba Ángel, todavía asustado dijo con enojo, Y vieras tu como quedo la parte trasera del mío……………………………………..

El día 20 de dic, como Tsunami aéreo, llego José Kalimba Ángel a mi lado, y junto con el, la carga emocional de 20 años de historia.

Tenía justos 2 años 4 meses cuando este mismo aeropuerto lo vio partir en mis brazos.

Poco a poco vamos acoplando el ritmo de nuestras vidas,

Llego con 42 cajas de mudanza de aprox. El tamaño de una caja de huevos,

Fueron 02 viajes en el pick up de la constructora para poder mover el volumen del aero puerto a la casa.

Aunque en un principio renegué por tanta carga, estorbo decía yo, la terapia de ir abriendo una por una y descubrir su contenido, era a cada momento un viaje de emociones encontradas.

Recibí un promedio de 08 enciclopedias que fui comprando a José Kalimba Ángel, con la esperanza de inculcarle el amor a la lectura, y despertar su imaginación, algo fallo.

El tener los libros en las manos, me hizo evocar con una mezcla de lágrimas y recuerdos las enciclopedias que Dn Vicente compro en su momento y que a mi me fueron guiando en un recorrido a través de 12 tomos en la literatura universal, desde juegos y fábulas infantiles, hasta obras que invitaban a querer saber mas de esta hoy pequeña aldea globalizada.

Ahí descubrí El Ingenioso Quijote de la Mancha, El Príncipe Feliz, Ivanhoe, El Último Mohicano, El Conde de Monte Cristo, los Miserables, La Isla del tesoro, ups, como me habría gustado conservar esos libros a mi lado, fue una muy motivadora herencia.

La enciclopedia técnica Jackson, fría analítica, cual medico con bisturí en la mano intentando despertar la pasión por la mecánica numérica,

T6ambien fue de gran ayuda para comprender los temas dedicados a las ciencias exactas.

Este pequeño gran impulso creo, fue decisivo e influyente en nuestra formación, en mi caso, me hizo aficionada a la lectura y una devoradora de toda revista que caía en mis manos.

Mientras José Kalimba me apresuraba para salir a conocer la ciudad, yo me hundía en el trabajo y emociones que cada caja significaba, libros, revistas, discos, fotografías, adornos, recuerdos de barro rojo, y negro, cuadros tejidos, reconocimientos, figuras de madera y fieltro.

Y entre estos aparecieron documentos y fotografías de Dn Vicente, y son los que comente.

He decidido conservar como recuerdo personal estos.

Es como tener mucho de lo poco que alcance.