sábado, enero 17

En mi silenciosa celda.

Tijuana BC En 009.   En mi silenciosa celda…………………

 

 

 

En el ocaso de un año pasado  sorteando tormentas, esta monja cartuja encuentra el milagroso bálsamo del humor y la ironía no para conjurar el pesimismo sino para fortificarlo y hacer de la inconformidad y la amargura las únicas virtudes posibles en la era del vacío.

En mi silenciosa celda, habitada por un descalabrado espíritu navideño, yo humilde monja lloro con las sentencias  pasados traídas al presente: Te equivocaras en el cero y en el punto decimal, por los siglos de los siglos……………………….

Resultan fascinantes el hastío, la desilusión, la claridad y el tino del Ingeniero que nos enseñaba a hacer operaciones matemáticas con regla de cálculo en el Instituto Tecnológico donde estudie.

Y no le faltaba razón, pues entre la distracción que vivi, por la edad, por recibir instrucciones y conocimientos nuevos, la libertad que me daba el estar en una escuela superior, y lo difícilmente práctico que resultaba hacer las operaciones.

Invariablemente cometía errores, fundamentalmente en el número de ceros y la colocación del punto decimal.

Con esas regletas, los estudiantes técnicos, nos distinguíamos del resto de la población mundial.

Para mayor impacto, se cargaba en la bolsa de la camisa, de tal forma que era necesario que sobresaliera para que quien nos observara, tuviera la certeza de que estábamos en una carrera técnica.   

También servia para utilizarse en realizar casi cualquier operación matemática, empezando desde la mas sencilla, hasta la obtención de logaritmos, pasando por las raíces cúbicas, senos de ángulos, cósenos y tangentes.

En la escuela nos preparaban para el futuro en que entre otras cosas, debíamos resolver cuanto problema se presentara con el auxilio de la mágica reglita, sin necesidad de afilar el lápiz y efectuar a mano las operaciones y mucho menos pensar en las computadoras con las que ahora se toman fotografías y videos, efectuando cálculos en cuestión de fracción de segundos.

No, entonces lo único de que disponíamos era la regla de cálculo, con la que podíamos, después de un tiempo conocerla y adquirir destreza.

Solo que siempre hay un "ups", la regla presentaba la dificultad de que los resultados, los leíamos en las rayitas de las escalas y números, sin que pudiéramos ver los puntos decimales, o el número de ceros.

Así que había que determinarlos.

Ahí estaba la maldición.

¿Dónde iba el punto? y ¿Cuántos ceros llevaría el resultado?

Nunca pensé que la maldición tuviera tanta extensión, ……………………He recibido las consecuencias por alguien a quien cayo la maldición.

Mucho menos me imagine que no solo afectaba a las reglas de cálculo, sino que ha caído en los operadores de computadoras, y principalmente a los operadores del Ayuntamiento de Tijuana.

Con especial dedicación a los encargados de cobrar las tenencias vehicular.

Me explico: José Ángel, mi hijo, por comodidad en su trabajo, se compro un pick up, Ford Ranger, en este pasado año 008.

Dentro de sus obligaciones como ciudadano, esta el pagar el impuesto a la tenencia, el cual, el gobierno estatal y mañocipal, para estimular a cumplirlo, ofrecen en este mes de enero, el 12% de descuento a los cumplidores.

Por ser la primera vez que cumple con este trámite, me pidió acompañarlo.

Se inicio el proceso con una sorpresa, para poder cumplir, debimos pagar una constancia de no adeudo de multas por $137.00 pesos.

Posteriormente, con documentos a la mano, pagar.

01. Donativo obligatoria para la Cruz Roja…………………………………………….$   54.80

02. 15% imp. Adicional p/educ.Media………………………………………………………$    36.94

03. exp. de Calcom y T.C. front. ………………………………………………………………$   246.25

04. Redondeo………………………………………………………………………………………………..$         .25

Total Estatal………………………………………………………………………………………………….$  283.42

05. Imp. Para Manto. Vías Publicas……………………………………………………………$   215.78

Total…………………………………………………………………………………………………………………$   554.00

Descuento en tarjeta de circulación 2009 del 12%                           $      38.82

¡Tenia que ser! Les cayó la maldición, se equivocaron.

De comentarios con conocidos deduje que no hay una cuenta correcta.

Es un perder el tiempo querer modificar lo que cobran, alegar y querer pagar lo justo.  

No escribo  farsas. Resulta fascinante, la desilusión, la claridad, la insensatez.

La razón me abandona cuando necesita pensar.

Murieron tristes y lacónicas mis ilusiones, dejando tras de sí hijos felices y vanos.

 Optimista consumada: por las noches zurzo mi corazón.

Quisiera morir silenciosamente, sin dejar una huella, como muere una música lejana en un oído distraído. …
Hasta el convento llegan llegan las protestas, reflexiono… con la soñadora e innecesaria  buena voluntad me despido temporalmente de ustedes.

El Señor esté con ustedes. Amén.

 



                                              Andrea Guadalupe.

                Tijuana BC. México. Tierra que abraza siempre al regreso, que cobija entre latidos  
                                            sumergidos en una busqueda natural.

                   Desde mi rincón existencial, donde el  sol nace al poniente.      

 
 







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