viernes, enero 24

Tod@s somos maestr@s y discípul@s

Enero. 2014.         Tod@s somos maestr@s y discípul@s.
Cuando escribo, lo hago a manera de diario, con la intención de compartir una experiencia, una vivencia,  como todo en la vida, nada es circunstancial, y de todo se aprende algo, o se comprende de una nueva forma, entonces lo que cada persona perciba sobre algún hecho particular, es sólo su percepción.  
Al escribir, la idea principal es ayudar, aunque, quizá, escribo para mí misma, porque termina siendo una ayuda que me aclara las ideas, y me hace llegar al punto de comprensión en el yo interno, el cual,  ha tenido un relámpago de luz, y busca a través de las palabras, una luz que sea más que un relámpago.
Aunque, finalmente éstos alumbran a much@s, porque, las palabras, son energía que el uso en el tiempo les ha dado, porque tiene más poder que el pensamiento, completan la energía del sonido, y tienen un significado que en forma directa o subliminal nos afecta, positiva o negativamente.
Su uso tiene un efecto de acción, que muchas veces funciona como un boomerang,  ya que somos receptores de la misma energía que transmitimos, de ahí que, lo que obtenemos de la vida, depende en gran parte de lo que decimos y de nuestra forma de expresarnos
Hace algunos años, tenía yo la idea de que para escribir, lo esencial, era tener un maestro.
Le encontré en el autor de una serie de libros que respondieron casi todas mis preguntas y dudas, de ese momento.
Estaba alegre, hasta que un día, alguien  me derrumbó la idea.
Fue una experiencia muy fuerte, me explico que para aprender a escribir, primero debía yo aprender a vivir, fue tan fuerte la experiencia, que por lo mismo pude asumirla.
Si hablas de un maestro, me dijo, sugieres la idea que entonces yo era una seguidora, y una discípula toma la sabiduría de su maestro y sus estructuras personales.
Entonces había que eliminarlo.
Ego, respeto, orgullo, y un montón de emociones hicieron una tremenda guerra entre sí.
El resultado fue que cada situación, persona, libro, intuición, era el maestro propicio en el momento indicado.
En el sentido espiritual la palabra: maestro, significa la maestría de una misma.
No tiene relación con seguidores, o aprendices de su conocimiento, y en el transcurso de la vida he encontrado muchas personas buscando un maestro; incluso algunas me han visto como la posible  maestra.
Y nunca he pensado que podría ser maestra de nadie, tal vez si guía en algún aspecto particular y por un determinado tiempo.
Más de eso, no, se puede ser empática en algunas cosas, y en otras no.  
En un sentido general, tod@s somos maestr@s y discípul@s, pues quienes hemos transitado mayor tiempo  en la vida, podemos tener una visión más amplia que quienes comienzan recién ese tránsito, esa es toda la diferencia.
Y en ese aspecto, el maestro no está para dirigir, está para compartir. 
Si encuentras uno así, agradécele a la vida,  si no es así, continúa buscando.
Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar donde agradezco los comentarios que llegan, me hacen reflexionar, y eso es muy positivo.

Andrea Guadalupe. 

jueves, enero 23

Querida Andrea…

Enero 2014.         Querida Andrea…    
El lenguaje es un medio de proyectar imágenes y creaciones en la tercera dimensión, el lenguaje expresa lo que se quiere expresar y que no es siempre la realidad, porque las palabras no alcanzan a reflejar esa realidad, más cuando cada persona impregna sus propias palabras con su propia realidad.
El problema es escribir desde esta nueva percepción, intentando ser comprendida por quienes me leen y tienen otra percepción, es un desafío grande y tal vez difícil.
Más tengo claro que, como en muchas otras actividades, cuando se cruza la línea de sin retorno, hay que asumir esa responsabilidad.
Elijo escribir bien y divertida aun cuando no sepa cómo.
Querida Andrea: Esas dos palabras, me transportan a otra época…cuando nos escribíamos…
¿Cómo podría haber sido otra cosa?
Ahora veo que todas, salvo ésta, fueron cartas de amor malas.
Las cartas malas suplican amor, las cartas buenas no piden nada.
Es un placer anunciar que ésta es mi primera carta de amor buena…
Tengo suficiente de ti en la mente para toda la eternidad, así que, por favor, no te preocupes por mí, lo tengo todo.
Si me concedieran un deseo, sería que la vida te brinde…un poco de la felicidad que tú me has dado.
Porque cuando el amor es verdadero, es un amor para siempre; es el verdadero antídoto contra el afán de venganza, la ira, el odio, el resentimiento y el rencor.
Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar donde estoy convencida que: la luz está dentro de nosotr@s, hagámosla resplandecer.

Andrea Guadalupe. 

Hoy, nuevamente estoy viva…

Enero 2014.         Hoy, nuevamente estoy viva…
Hoy respiro, estoy viva, un rayo de luz se filtra entre las cortinas, diminutas partículas bailan en ese rayo de luz.
Al abrir las ventanas el sol inunda maravillosamente de luz la habitación, el aire fresco del amanecer se pasea por mis pulmones, y el oxígeno se incorpora al torrente sanguíneo.
Mis ojos se fascinan con el celeste del cielo, y el jugueteo de algunas nubes.
Siento el aire en mis pulmones, siento la energía en mi cuerpo, vibrando en mi corazón, en las yemas de los dedos, en el eco de la pulsación interna en mis oídos, también siento el aire rozando mi piel.
Hoy, nuevamente estoy viva, respiro, y estoy agradecida.
Nuevamente un montón de segundos, de minutos, de horas, para ser feliz, para ayudar, para comprender, para ser.
Otra oportunidad para amarme y así amar, para corregir algunos errores, para aprender a ser flexible, para aplicar la compasión, para desarrollar la tolerancia, para practicar mis habilidades.
Y tengo todo lo que necesito, aire para respirar, luz para crecer, música para recrearme, la naturaleza para deleitarme, y conciencia para darme cuenta de todo esto.
Vivir es estar despierta, estar consciente del ahora, de aquello que tengo, apreciarlo, y agradecerlo.
Respiro profundamente, realmente soy privilegiada, estoy viva y puedo escribirte que te amo y saber que al leerme, estás tan viva como yo.
Y tienes todas las maravillas que me han sido concedidas.
Despierta, es todo lo que necesitamos para ser.
Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar donde estoy convencida de que: Se puede,  tú puedes, tod@s podemos.

Andrea Guadalupe. 

miércoles, enero 22

El día que me enviaste un beso…

Enero 2014.          El día que me enviaste un beso…
Hoy …el tiempo es tan distinto, que tengo la sensación que no existe…me asomo a la vida cuando estabas, y es como una eternidad porque llena todo mi mundo, todo mi universo … y no sólo eso, también me permite estar consciente que esto, está sucediendo…
Hoy, que no estás… recuerdo cosas que hiciste o dijiste, como el día que me enviaste un beso por si te hace falta para el fin de semana… en ese breve espacio sí me hace falta, y felizmente lo tengo… lo recibo como nube de violetas.  
Hoy, que no estas a mi lado, te envío un beso para cada momento, para este aquí y ahora eterno… un beso que te pinte de colores cada minuto que vives, un beso que representa un arcoíris que adorna tu paso por el planeta… un beso que adorne tu mundo de mariposas y luciérnagas… que cambie horas aburridas en otras de dicha plena… un beso que dibuje sensaciones desconocidas… que recuerden planetas violetas… constelaciones lejanas…
Hoy que no estás… las sensaciones se hacen conscientes… las emociones se armonizan… las palabras se convierten  en poesía… el recuerdo de tu voz en música… los sueños en esperanzas…
Hoy que no estas…, esta mujer que te ama, habrá aprendido a descorrer las cortinas de su piel, conociendo todo lo que anida en mí…, tendrá una golondrina de ternura…, sabrá estar a tu lado para abrazarte delicadamente…, y tendré en mi mirada, la limpieza de un amanecer de primavera…
En mi rostro tendré siempre una sonrisa, y respetare tu silencio y la tristeza si alguna vez la tienes…, y con caricias hare brotar sinfonías y alegría de tu cuerpo…
Mi cuerpo, será el lugar de reposo para tu descanso…, el recipiente de tus preocupaciones, el lago donde flotar, sin miedo que el ancla del compromiso te impida volar cuando se te ocurra ser pájaro, hare poesía con tu vida…, no conoceré el miedo a descubrir tu amor ante la multitud…, podre gritar, cantar te amo…, te espero respetuosa, sensible, con delicadeza, con una sonrisa… para compartir, el calor de tus abrazos…, recibir la serenidad de tu pecho…, dando paz a tu alma, brillo a tus ojos.
Y así, tus noches nunca más serán oscuras, en tus días brillará el sol…, porque eres única, especial, diferente…
Y si algún día vuelves, estaremos en otra dimensión… porque tú estarás ahí…
Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar donde, hoy, que no estas a mi lado, esta mujer que te ama, habrá evolucionado, esperando pacientemente… perseverando en el sueño que un día… vuelvas.

Andrea Guadalupe. 

domingo, enero 19

Solo hace falta que me leas, porque…

Enero 2014.               Solo hace falta que me leas, porque…
Quienes escribimos y describimos sueños, vemos cosas que la mayoría no ven, y las atraemos a sus realidades.
Nos atrae el resplandor de un rayo de sol, la caricia de la luz plateada de la luna, la cautivante hermosura de la rosa en flor, la ondulante llama de una fogata, el monótono juego de las olas del mar, el movimiento de las ramas de los árboles, el incesante viajar de las nubes.                         
Quienes escribimos, crecemos con los sueños, y los describimos para  aprender de realidades impensadas, y al soñar las vamos creando.
Quizás…ahora puedas entender por qué… piso las hojas de los arboles con delicadeza… converso con el agua, que me trae suspiros inmensos… platico con los árboles que al pasar me cuentan lo que vieron… las nubes me saludan… el viento me susurra canciones de amor… respiro y vivo…
Quizás… es sólo alucinación… es la maravilla de hacerse consciente, la magia de darse cuenta… y sólo son palabras para intentar describir lo indescriptible.
Quizás… es el amor que teje emblemas arcoíris que viajan para alcanzar a otros seres… mi corazón se acelera en su latir…  y el pensamiento le hace caricias…
Quizás… soy muy feliz… infinitamente feliz…
Quizás…ahora puedas entender por qué  escribimos para mantener en quienes sufren y pierden, las esperanzas, para mostrar los sueños hechos realidad, para inventarlos a aquell@s que no se creen con la capacidad para crearlos.
A través de la palabra escrita, los nutrimos y protegemos, impidiendo que mueran, pues son nuestro norte y nuestro  futuro, y con ella, creamos la realidad y la fantasía en todas partes y en todos los tiempos,
Quienes escribimos y describimos sueños, somos parte del sueño original.
Y con nuestra magia, llevamos la risa y alegría allí donde está ausente, a tod@s sin distinción.  
Estamos a tu lado aun cuando no nos veas, aun cuando no nos percibas, aun cuando no creas en nosotr@s.
Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar donde siempre estoy aquí,  a tu lado, solo hace falta que me leas, porque existo y estoy contigo.

Andrea Guadalupe. 

Aun cuando no tenga eco.

Enero 2014.           Aun cuando no tenga eco.
Hoy domingo, en esta mañana de enero, es un día un poco gris, frío, con el sonido de hojas secas raspando el suelo, con los árboles semidesnudos, estremeciéndose sus ramas cada vez más despojadas de hojas, por la brisa fría y constante, que me invita a recordar  el sol cálido del verano, en un lugar casi  sin árboles, con el rumor permanente de las olas del mar, que suavemente musitan una melodía eterna.
Y en ese lugar, contando sueños, coloreados de promesas y esperanzas, escuchando divagaciones de una amiga que tiene las mismas esperanzas que yo.
Porque, quienes escribimos, inventamos una realidad que no existía, aunque que puede ser.
Creemos que todo se puede transmutar, y somos muy sinceras cuando lo decimos.
Sólo que a veces no tenemos la maestría necesaria para concretar lo que sabemos, se puede hacer.
Y esta evocación es con olor y calor del estío, con rumores alegres, con la sensación de tranquilidad en el aire, con sueños hermosos, con anhelos inmensos.
Y se  hace visible porque es real, porque tiene todas las adiciones que podamos relatar, porque existió, de alguna manera aún existe, y seguirá existiendo.
Y este día de enero, que siento tan nostálgico, me invita a añorar.
Me aparece el recuerdo del mar, observado durante mi infancia, y mágicamente mi sentido del olfato lo percibe claramente como un milagro, con el sabor a sal, con el rumor de las olas.
La quietud se intensifica, lo maravilloso del momento emociona, hay una sensación de quietud, todo indica el reposo, el cielo se pinta de tonos azules.
Ahora los ojos brillan más, húmedos de emoción

Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar donde decido seguir escribiendo, aun cuando no tenga eco.
Andrea Guadalupe.   

sábado, enero 18

Ya no me regalas ni palabras…

Enero 2014.       Ya no me regalas ni palabras…

Cada vez que te soñaba, te añadía un detalle, para ver si de tanto soñarte conseguía borrarte y  te enredabas para siempre entre mis sábanas.
Mientras te esperaba, continuaba acunando todas las noches los lápices olvidados, los días que enturbiaron los recuerdos, nuestras primeras veces, el miedo a envejecer, el temor a vivir.
Ahora confieso que me equivoqué al pensar en el dolor de tu pérdida, porque, una no aprecia lo que tiene hasta que lo pierde, aunque no por la falta, sino, porque una no lo siente palpitar dentro, navegar, perderse, anclarse y luego desgarrarse poco a poco, desapareciendo en el tiempo y llevándose trozos de una, con cada nueva marea.
 Esa mañana, me besaste por última vez antes de marcharte, mientras apartabas con enojo los restos de las historias de aquella anoche.
No cabemos en esta cama, fueron tus palabras.
Nuevamente, nos hemos encontrado tropezando por la vida sin rozarnos ni vernos, y nuestra piel no se ha erizado, no se ha estremecido ni temblado, y nuevamente has desviado la mirada.
Como un paso a desnivel apenas señalizado, donde de nuevo, la maquinaria pesada desbordada de aburrimiento, arrasa cualquier punto de encuentro.
¿Será la indiferencia? Me digo…. no como antes, cuando buscabas mi mirada sobre la tuya en el espejo, y yo me volvía a despeinar, fingiendo una rebeldía en los cabellos que jamás tuve, para arreglarme de nuevo y seguir disfrutando de tus ojos, de tu atención sin prisa.
Te sentía en mi cabeza, en mis manos, en mis miedos y deseos y arropaba el pánico de hacer algo indecoroso, de desnudarme incluso, porque yo era coqueta, no exhibicionista.
Siempre cuidadosa de no mostrarme tal cual era: llena de rincones y lugares obscuros que te invitaran al destierro.
Cuando todo eran bocetos de sueños, cuando no importaba la suciedad en la cocina, ni debajo de la cama, sino tan sólo protegernos de la mugre en la mirada.
Ya no me regalas ni palabras.
¿Cuándo dejaste de verme para mirar a otras?
No sé cuándo comenzaste a mirar a otras, quizás cuando me relajé y descuidé mi conquista, y dejé de sorprenderte… Ya apenas aprovechabas para rozarme y confundir nuestros sueños mientras dormíamos, o tal fuera porque no soñamos el mismo anhelo.
¿Qué te pasa?, me reclamabas, y el temblor no me permitía articular palabra alguna.
Y mientras la costra enraizaba en tus ojos, una corteza engrosaba mi habla, con la boca pastosa de tanta distancia.
¿Qué te pasa?, me preguntabas siempre desde la ausencia.
Y ya no me queda grito, susurro o palabra que escupir, por eso me han entrado ganas de desafiarte de nuevo y vestirme para la guerra.
Y he buscado tus ojos para contártelo, sólo que, te he encontrado inmóvil sobre la moldura desgastada de otros tiempos.                            
Lentamente, me he desecho del rímel, del labial, y los matices del maquillaje.
Me he quitado las zapatillas de tacones, las medias, y por un instante, he sentido el mareo que ocasiona, levantarme después de una caída, y he pensado, esa pared va necesitando pintura.
Desde Tijuana BC, lugar donde, ya jamás podré amarte, ni odiarte, ni extrañarte, ni volverte a amar y odiar, ocupada como estoy en hacer llevadera la pérdida de todo amor, odio, extrañeza o anhelo, porque ya no me regalas ni palabras.

Andrea Guadalupe. 

viernes, enero 17

Los sueños no cumplidos…

Enero 2014.    Los sueños no cumplidos…
Cuando él, en su infancia, sin saber por qué, miraba encantada las uñas pintadas de las jóvenes, sentía la seguridad de que una vez que pudiera pintar las suyas, la vida también la vería con más matices.
Estas, llegaron con miedos mezcladas con una íntima alegría a la par, que el discreto maquillaje. 
Se sintió plena frente al espejo aunque defraudada al comprobar que todo su entorno parecía no deslumbrarse por su reciente belleza.
Los tacones aún le quedaban muy lejos y así voló hacia una nueva espera.
Poco después, se dijo que sentiría la misma felicidad colmada al usar su primer sostén.  
Confiesa en susurros que ni aún entonces se sintió satisfecha.
Por aquellos días comenzó a sospechar que la totalidad nunca llegaba para quedarse, aunque, continuó poniéndola a prueba.
Me mira desde el cansancio y la paciencia, con ausencia de prisas y tiranías.
Y se engancha las manos a los brazos de la silla para que dejen de temblar.
Yo, intento mirar al frente y vaciar la mirada, las confidencias aún me producen una ansiedad que no sé identificar.
Así que la escucho en silencio para que a las dos esos minutos se nos hagan más breves.
Llegó un momento en que los muros y la seguridad de un closet, tampoco fue suficiente.
Quiso volar, la vida como la mujer que sentía ser, y con pareja, siempre sería mejor, razonaba, sólo que, un amor sin amor, sabe a poco futuro y demasiado presente.
Entonces, deseó en silencio vestirse de blanco, fue su nueva espera mientras se hormonaba.
Entonces sí que agarraría a la felicidad por la cintura.
Entonces sí que estaría a la altura de cualquier adversidad que le deparara la vida.
Creo que todas somos un poco soñadoras de vez en cuando.
Tod@s, en algún momento, depositamos nuestras esperanzas en un instante venidero, colmado de promesas imposibles que nunca terminan de cuajar, volviendo a licuar nuestras expectativas en cuanto añadimos ese otro ingrediente que nos falta para no sentir el vacío.
Ese amor que nos haga volar sintiendo el aleteo de mariposas en el vientre, esa promesa de amor eterno, esa espera sin espera.
Ese caminar sin disfrutar de los laberintos del sendero; sin detenernos, obsesionad@s como estamos por llegar a la realización final.
Sucumbimos a la meta que nos hemos fijado y que han constituido nuestros sueños, o los sueños impuestos por la sociedad.
Una meta que nos ofrece la recompensa de poder hacer coincidir la mente y cuerpo con el género con el cual nos identificamos y que con suerte, algún día seremos aceptad@s,  porque la primera recompensa no era otra sino el rechazo familiar, social y laboral, que es el común denominador de la comunidad Trans.
Me pregunto en qué manual están escritas los prejuicios y frustraciones, a los que debemos someternos a costa de nuestros sueños y de la propia personalidad.
¿En qué momento nos hacen firmar ese contrato lleno de cláusulas improcedentes el cual indica que debemos: ser jóvenes, bellas, atractivas, femeninas, deseables, estar siempre dispuestas a servir de juguetes sexuales?
¿En qué momento hicimos nuestras las expectativas que la mayoría asume como símbolo de nuestras características?
Y luego resulta que está todo vacío, todo es pura ausencia.
¿Y tú? Me preguntas sin curiosidad, sin esperar respuesta.
Suena la pequeña campana de la consulta y se levanta mirándome de reojo.
Me toca, dice, venir me alivia exclama mientras se marcha arrastrando sus sandalias,  el maquillaje de antaño, los pechos ahora arrugados, los sueños no cumplidos, y su vida.

Andrea Guadalupe. 

jueves, enero 16

Las palabras importan…

Enero 2014.   Las palabras importan…
¿Sabes?, Tú me enseñaste lo inútil que es a veces preocuparse por los caprichos del idioma.
No importa que no captes todo el significado de mis palabras, despreocúpate, no las analices,  ni intentes descifrar mis mensajes: Tan sólo siéntelas.
No quieras ver letras donde hay emociones, no quieras formar sílabas donde hay sentimientos desordenados.
No pretendas mirar de reojo, porque dar una ojeada, es percibir en apariencia, y ésta, disfraza la realidad.
Quizá por eso, existe la terquedad de conocimiento que nos obliga a mirar incansablemente.
No, no mires a vuelo de pájaro mis palabras, porque entonces vivirás atrapada en ellas.
Yo también he dejado de mirarlas, para no caer en su juego de creación: sé que estoy siendo concebida por ellas, y no opongo resistencia a dejarme inventar.
No…. no pretendas leer mis palabras, sólo acarícialas, aprecia su toque y escucha cómo te hablan.
Quizás ellas puedan contarte lo que yo no puedo, porque vagamos por el dilema angustioso de no poder explicar la realidad, cuando lo realmente peligroso es no ser capaces de inventarla.
Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar donde pienso que: Las palabras importan, si no, ¿Qué nos queda?

Andrea Guadalupe. 

miércoles, enero 15

Esa tierra de nadie donde duermen los sueños.

Enero 2014.    Esa tierra de nadie donde duermen los sueños.
Durante mis ensayos de muerte, nombre que le doy a mis noches, existen momentos en que mis párpados me relatan historias futuras.
Son esos instantes, cuando el silencio no pesa y el cansancio del ajetreo diario,  apenas ha llamado a la puerta.
Tiempo que eligen las palabras que después serán narraciones, para asomar la cabeza por debajo de la cama.
Se contonean entre las sombras, desnudas, insolentes, para susurrarme al oído.
Y mis dos perras chihuahua, ellas, que de naturaleza son tan inquietas, que a esta hora, suelen dormir tan profundamente que sólo intuyen tu presencia entre sus caninas fantasías.  Únicamente yo puedo olfatear ese deseo por aproximar tus labios a mi almohada.
Como aquel día que me hablaste de cómo, cuando todo duerme en casa,  se arrastra la lata de botones hasta el borde de la cama, se destapa, y entonces… empieza el show:
Primero los botones se muestran desconfiados, sólo que poco a poco van saliendo.
A veces despacio, otras veces saltan a como gotas redondas, también les gusta salir rodando como bolita o girando como platos voladores.
Después se agrupan por colores y arman un arco iris en la alfombra de la habitación; se vuelven a desarmar
Dibujo con ellos caminos que van lejos, olas de espuma besando las playas, humo de chimeneas y paisajes enteras.
También me gusta cargarlos y llevarlos a pasear por la casa.
A veces sueño que mis botones son estrellas resplandecientes, entonces acomodo los más brillantes sobre una cartulina azul y después me alejo para contemplar la noche de figuras radiantes y agujereadas.
Claro, de tanto jugar, el tiempo pasa, de golpe ya casi amanece y debo levantarme para iniciar mis quehaceres, entonces guardo uno a uno mis botones.
Eso sí, antes de tapar la lata, les saludo, y ellos, agradecidos, me regalan una pirueta.
Por suerte ya nadie los cose, no arrastran hilos ni ataduras, son botones en libertad.
O sobre aquella ternura de las soledades compartidas de los amantes.
Historia que se agarró dentro y creció en su propia historia mientras tengo que dormir abrazando una almohada en mi cama, porque, cuando apago la luz y me acomodo para dormir, siento como tú, te recuestas a mi lado.
Tu voz es la misma que a veces me grita cuando descubro algún recuerdo olvidado en mi memoria, o te escucho llorar entre las páginas de un libro que alguna vez significo mucho en mi vida.
Sólo una vez logré ver quién eres.
Una vez fui esa criatura, sólo que acabó consumiéndose, ahogándose en sus metas y en su esperanza en las revoluciones lentas de conciencias.
Y ahora regresa con ánimos de no dejarme dormir tranquila.
Quizá cuando me pregunta ese: ¿Por qué?, Quiera saber qué fue lo que hizo que la dejara morir.
Aunque yo me callaré y la dejaré dormir esa noche conmigo.
Tal vez desde su odio me quiera, y cuando me quiera, me perdonará.
Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar donde: Escribir una historia es habitarla, me dijiste, ya que hay que dejarla ablandar en esa tierra de nadie donde duermen los sueños.

Andrea Guadalupe. 

lunes, enero 13

Las amigas siempre me inspiran…

Enero 2014.   Las amigas siempre me inspiran…
Comienza la semana y tú… No estás, aunque, hace mucho que todo comienza sin ti, y hoy… además, no estás.
Como cada lunes, me marco un nuevo reto: una dieta, un curso, el gimnasio.
No lo hago para cumplirlo, ni por sentirme en la moda; sino para saber cada miércoles que me falta voluntad y para cada domingo proponerme ser mejor; marcándome para el próximo lunes, un nuevo reto (una dieta, un curso....)
Hoy desperté sola en la cama, como cada mañana, aunque, con la agravante de que… hoy no estás.
Hoy, el almanaque señala sin discusión que ha comenzado un nuevo día, sólo que…  No está tan claro.
Yo le escribí un poema, ella corrigió mis faltas y lo devolvió sin más.
Cuando se intenta conseguir un sueño, dormir no es una opción.
Te das cuenta de que: No es que haga más calor, es que los sueños nos arropan.
Los sueños son cosas de jóvenes, porque soñábamos con tener dos hijos, una casa, un auto para viajar... Y luego, llegamos a esa edad en que, esa excusa sirve para dejar de soñar.
Para finalizar la discusión ella me lanzó una botella y se fue, aunque… No entendí lo que pasaba porque la botella no llevaba mensaje dentro.
Tengo tantos textos sin acabar que… estoy acabada.
Querido amiga: Claro que me inspiras, de verdad, las amigas siempre me inspiran, aunque… a veces, me inspiran textos, otras veces, confianza y en ciertas ocasiones… lástima.
Un fuerte abrazo.
Cerré la puerta de golpe y respiré profundo, sólo que ella…  ya estaba dentro, esperándome en el espejo...
¿Sabes? Esperaba tu llamada o un mensaje o quizá un mail, tan sólo llego tu silencio y una duda: No tienes nada que decirme o prefieres no decirme nada.
Cada día que pasa, defiendo más la teoría de la insignificancia, aquella que argumenta, que un gesto por pequeño que sea, no debe ser despreciado porque es un buen comienzo.
Si yo no defiendo la insignificancia, quien me defenderá a mí.
Hace tiempo que mis textos no son completos, descubrí el motivo: tus ojos no se permanecen en ellos.
Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar donde por fin, ella se atrevió a empujar la puerta y entrar… Lo malo es que no era mi casa.

Andrea Guadalupe. 

domingo, enero 12

Me invade el sentimiento de que he defraudado a alguien.

Enero 2014. Me invade el sentimiento de que he defraudado a alguien.
Hace tiempo que tengo tanto que contar... que no cuento nada, escribo por no gritar, eso molesta más aunque tiene más audiencia, aunque… En realidad, escribo por discreción.
Siempre quise dedicarle a ella un poema de amor, es fácil, me explico un amigo poeta, basta con que digas lo que sientas, ese fue el problema.
Hubo un tiempo donde justificaba mis decisiones, ahora me basta con compartirlas.
Hoy para desayunar sólo quiero un beso, ayer cené demasiado.
Él amor se cansó de unirlas y se fue en busca de otra pareja, aunque, ellas…No lo notaron preocupadas cada una por lo suyo y siguieron juntas muchos años.
Me gusta invadir tu espacio, nadar en tu cuerpo, a veces, disfrutar de tu ausencia pensando en el abrazo de vuelta.
Me gusta que a veces no estés, sólo que, no me gusta que te vayas.
He tomado una decisión que me ayudará a salir del profundo pozo en el que vivo sumergida, he decidido mudarme…aunque, ahora llega la segunda parte que sobrelleva la decisión, de definir si lo haré de casa, de pareja o de ropa interior.
Les pedí completa sinceridad a mis amigos y desde entonces han dejado de llamarme.
El día que decretemos el dinero como idioma oficial del mundo, dejará de existir hipocresía.
Para perder peso no hay nada mejor que decir la verdad, una pierde kilos de opresión y a veces, alguna amiga.
Entre en la política cansada de que no me contaran la verdad, salí de la política en cuanto la conocí.
Caminando por las calles pequeñas me gusta recorrer este barrio de la ciudad que está a medio iluminar.
Si, da un poco de miedo, aunque aquí siempre huele a comida casera recién hecha, incluso a bufanda recién tejida
Aquí, las abuelas salen a la puerta y comentan que sus nietos no las van a ver nunca.
La calle suele estar vacía sólo que es muy agradable, ahí se ubica el asilo donde quedo mi abuela.
Hoy es domingo y llueve amor en la calle, sólo que la gente no se da por enterada.
Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar donde cada vez que percibo que, han dejado de leerme, me invade el sentimiento de que he defraudado a alguien.

Andrea Guadalupe. 

sábado, enero 11

Y yo... sin nada que decir que no sea: Gracias.

Enero 2014.    Y yo... sin nada que decir que no sea: Gracias.
Hoy, como cada mañana, he abierto las ventanas de la casa para que se renueve el aire y mis fantasmas… Qué triste el día que amanece con el cielo cubierto de nubes y vacío de esperanza.
Cuando una tiene algo, al compartir, se multiplica por dos, aunque, no, no esto no es otro intento de conseguir que aceptes que probemos un trío.
No hay dos sin tres, ley básica de una orgía.
Cuando te vi, supe que eras la mujer de mis sueños, al abrir los ojos lo confirme: Ya no estabas.
En el fondo sé que me quiere, lo malo es que ella nunca quiere profundizar.
Lo importante de tus silencios no es lo que callas sino lo que gimes.
No aguanto cuando me gimes mentiras al oído.
No hay pregunta más capciosa que: ¿Tienes un minuto?
Rompe tu hipocresía y pregunta: ¿Puedes compartir un minuto conmigo?
Estaba decidida a contarte mi secreto más oculto, sólo que: No fui capaz de encontrarlo.
Últimamente, al poner el punto final a mis textos, y mirarlo con distancia descubro dibujada mi vida: ¿Seré mi propio personaje?
Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar donde descubro que, es una gran responsabilidad que haya personas leyendo esto y yo... sin nada que decir que no sea: Gracias.

Andrea Guadalupe. 

viernes, enero 10

Al acabar un texto…

Enero 2014.   Al acabar un texto…

Aquella comunidad, era tan secreta, que  ocultó su entrada y jamás tuvo miembros.
¿Serán los sueños las realidades que la luz del día no nos deja ver?
Me acusas de no tener tiempo de escucharte, aunque, no te das cuenta de que hace mucho tiempo que no me cuentas nada, tan sólo hablas y hablas y hablas...
He subido a la cima más alta, cuando baje de tu boca a tus labios…
No me llamen idealista porque quiera cambiar el mundo, yo les puedo demostrar prácticamente que con una pequeña chispa se enciende un gran fuego.
Ante el aspecto que tomaba la relación decidí tomar una decisión: huí de ti, porque tú y yo sabemos que ese no era el problema, sólo que, huir de mí es tan difícil.
Ella murió cuando yo era joven, desde entonces ninguna de las dos vive.
Antes yo era feliz, tenía amig@s,  no sólo para compartir penas, también eran alegrías, fiestas o cenas.
Ahora, con el Facebook, la amistad me rodea y me ahoga la soledad.
Sólo quería tu aprobación, una mirada de apoyo; sólo que nada o lo que es peor: reproches, superioridades,….Se acabó. Esto es un punto y final.
Con un golpe, destruyo la necesidad de tu mirada y olvidaré para siempre esa cara, sin importarme que: romper el espejo, me traerá siete años de mala suerte.
Tengo miedo de quererte y tú no me quieras, aunque tiemblo de miedo al imaginar,  que tú me quieras y yo no me dé cuenta.
Todas mis compras las hago por impulso, sólo compro en las tiendas donde la dependiente me regala una sonrisa.
La mujer de mis sueños tardó tanto en llegar, que yo, ya me había despertado.
Es curioso cuanto más tiempo paso en el campo por mi trabajo, más civilizada soy.
Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar donde al acabar un texto, agito el cuaderno con fuerza, y así, me libero de las palabras que sobran  y las guardo, por si algún día escribo una carta.

Andrea Guadalupe. 

jueves, enero 9

Lo importante de tu saludo…

Enero 2014.                   Lo importante de tu saludo…
Me suscribí a tus post por Internet para recibir cada día un e-mail y poder saber de ti.
Ahora me he dado cuenta de que sigues lejos: Sólo sabía lo que querías contar, y eso, ¡Nunca es suficiente!
Créeme, recién me acabo de dar cuenta... llevamos media hora sentadas tomando café y ahora que miro con detenimiento… me acabo de dar cuenta que... no te soporto.
Cuando te fuiste, olvidaste unas pantaletas bajo la cama, un par de aretes en la mesa de noche, tu cepillo dental en el baño y la voluntad de volver a buscarme.
Esta mañana al arreglarme frente al espejo no me vi, sólo veía los azulejos a mi espalda, la cortina al fondo, aunque… no a mí. ¿Será que estoy vacía?
Yo lo intento, créame que de verdad lo intento, aunque, no puedo tragar a todo el mundo.
Así declaró el antropófago ante las críticas por ser selectivo.
De nuestra relación, quedaron días inolvidables, después todo acabó, sólo nos quedó una sensación de satisfacción completa, aunque… Sin un solo recuerdo.
El destino, más que un cruce de caminos, es un cruce de miradas.
Esta madrugada ha vuelto a pasar, cuando me acosté, minutos después, quedé profundamente dormida y horas después sucedió: sonó el timbre.
Salí corriendo a abrir la puerta, aunque cuando llegue ya no estaba: Otra vez más se había escapado mi suerte.
Este maldito insomnio, me mata mis sueños.
Cuando tengo sueño me tomo un café y se me pasa, ¿Por qué ahora que me he tomado diez sigo con mis sueños?
Sentada delante del papel en blanco me doy cuenta de que no tengo nada que contar, me levanto y tomo un libro cualquiera.
Empiezo a leer y descubro que no soy la única que no tiene nada que contar.
Quiero llamarte por el placer de oír tu voz, no deseo contarte nada, tampoco que me cuentes nada, simplemente descuelga el teléfono y respira: Busco un lugar donde esconderme de tu ausencia.
Sonó el teléfono, lo descolgó el despertador: era la hora.
Siempre has sido sincera conmigo... Me has contado tus movidas, tus broncas, inquietudes, tu ideología, tus gustos.....Siempre has sido sincera conmigo, aunque lo de hoy es demasiado: Hoy me has contado que ya no me quieres.
Volver no es sólo regresar, es cuestión de dar la vuelta, encarar miradas, remover recuerdos, reencontrar viejas caras, sorprenderse con rostros nuevos.
Volver es reencontrarse, aunque sean sólo palabras.
Andrea Guadalupe.

Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar donde lo importante de tu saludo no es su contenido, sino su existencia.

miércoles, enero 8

¡No sé a quién echo más de menos!

Enero 2014.           ¡No sé a quién echo más de menos!
Me reconozco novata en esto, y me gustaría que alguien me enseñara.
Algo he escuchado, aunque, confieso, no acabo de entender el mecanismo.
Suplico a quien me lea, sepa y pueda, me conteste a mí e-mail, indicando: ¿Cómo se vive?
A tiempo, la hora se gastó todos los cuartos y aun así, dejó la compra a medias.
Lo siento, las dos sabíamos que esto tenía que terminar antes o después, las dos éramos conscientes de que el final estaba tan cerca, sólo que nunca imaginamos, ¿Qué tan cerca?
Tú y tu maldito recordatorio cada mañana, mientras, yo, puntual y con la mayor ilusión te buscaba y tú nada, nada de palabras alegres, de aliento…
¡Qué diferente hace un año!  Sólo sabías decirme cosas bonitas, aunque ahora… Lo siento, te tengo que hacer callar.
De verdad me duele tener que quitarte las baterías, mi fiel báscula digital parlante del baño.
Esta mañana al despertarme me he dado cuenta de que no estabas.
He empezado a llorar al darme cuenta de que no sé: Si ya te ha ido o nunca estuviste.
Quien me conoce, siempre piensa que soy callada, tímida o introvertida.
En verdad, no soy nada de eso, lo que sucede es que digo lo que pienso.
La frontera une lo que divide.
Te diré… Me aseguro de que no estás para poder hablarte en confianza.
Ella me dejó de amar porque si, sin más ni más, un día, al menos, me queda el con suelo de que: llega la noche.
He tomado la costumbre de no darle la espalda a mi reflejo del espejo.
¿Cómo podría confiar en una tipa con esa cara?
Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar donde, esta noche no me ha visitado la inspiración y tampoco tú.
¡No sé a quién echo más de menos!

Andrea Guadalupe. 

martes, enero 7

Divagaciones…a tus oídos…

Enero 2014.           Divagaciones…a tus oídos…
He descargado en la pc, un corrector de textos para descartar mis faltas de ortografía antes de subir mis escritos, también un editor de imágenes para quitarme los ojos rojos de las fotos y, ya de paso, alguna ojera, arruga y verruga que nunca dan buena imagen.
Lo que aún no he conseguido es donde me descargar el programa que convierta a mi pareja en la mujer de mis sueños.
Busco a mi pareja, no sé dónde está desde anoche, estaba en la sala de la casa, llevaba puesta el pijama, la bata y unas zapatillas rojas.
A algún sitio se habrá ido… Aunque…Me dijo que iba a quedarse navegando por Internet.
Mi boca no deja de guardar secretos; mis ojos no dejan de gritarlos.
No encuentro una mirada que calle todo lo que no quiero decir.
Hoy descubrí que ya no me quieres como antes, ha sido un proceso lento, sólo que  ahora ya no queda lugar a la duda: estoy delante de ti, desnuda y me has mirado a los ojos.
Hoy pasé por tu blog aunque no estabas: Me dijo un vecino que te estabas actualizando.
Entre el oído y el odio varía una letra y la capacidad de escuchar frente a la cerrazón.
Tengo tantas amistades en el Facebook y no entiendo por qué estoy tomándome este café yo sola.
Te quiero más que a mi vida, dijiste, aunque… Si fuera verdad te habrías suicidado en lugar de matarme.
He vuelto a revisar las direcciones de mis visitantes, he revisado la lista de seguidores.
Lástima, hoy tampoco, tú estabas.
Hace tiempo que ya no le cuento mis secretos al espejo, y todo porque él no me cuenta los suyos.
Esta mañana se ha caído en el baño mi única verdad y se ha hecho añicos.
No te preocupes por el espejo, me ha dicho mi hijo, sin entender porque lloraba.
Se busca pareja para compartir sexo y lo que surja.
He descubierto lo mucho que te echo de menos, acabo de ser consciente del tiempo que hace que no estás conmigo.
Ahora que he entendido esto... sólo me falta entender que sigas sentada a mi lado.
Ayer llegue a casa y la verdad es que no he conseguido que huela a ti, así que mejor me deshago de tu perfume, tu ropa, tus libros y, por supuesto, de tu cadáver.
Me miras, llevamos cinco minutos sin hablar, creo que ya no tenemos nada que decirnos.
No tengo nada que decirte, aunque, tu silencio es tan agradable que levanto mi taza y doy otro sorbo.
No me atreví a publicar que me enamore de ti, por miedo a los comentarios, así que lo guardo como borrador por si te vuelvo a ver.
Mi mayor virtud es que tengo algunos defectos poco desarrollados.
Suena otra vez el teléfono y ahora sí que es el, me llama para ofrecerme una nueva vida, me habla de un futuro mejor, con seguridad económica si vuelvo a su lado.
Me promete muchas cosas aunque nunca quiere hablar de lo pasado, dice que fueron episodios sin importancia, que todos cometemos errores y que es mejor que pase página.
Así que le digo que no, que no le creo, que el pasado no se olvida y que no, no, no y no voy a cambiar de proveedor de internet, cable y teléfono.
Hoy he terminado de diseñar como será mi vestuario, lo he anotado junto con el boceto del escenario en el que daré mi primera rueda de prensa.
Lo tengo todo decidido, que dedicatoria pondré en las portadas, el tipo de fotografías que se publicaran, que personajes me harán compañía…
Ya estoy lista... Ahora ya puedo tomar papel y lápiz, sentarme y aprender a escribir.
Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar donde surgen mis divagaciones… a tus oídos, en las que me pierdo y te suplico… Encuéntrame.

Andrea Guadalupe. 

domingo, enero 5

Detrás de la pantalla…

Enero 2014.   Detrás de la pantalla…
Llevaba ya un tiempo chateando a diario con aquella persona.
Le conozco bien, y sé que podría ser con quien pasar el resto de mi vida,  precisamente por eso he decidido dar hoy el gran pasó: Una cita a las 06 de la tarde en el café.
Me he presentad puntual, pido un café y me siento a esperar.
Pasan las horas y las mesas se vacían poco a poco.
Fantaseo con la identidad de quien espero, ilusionada, hasta que me doy cuenta de que sólo quedamos tres personas: una mesera, quien me mueve el tapete y yo.
Ahora descubro que me guardaba un secreto, está frente a mí, sentado, aunque no puede verme.
Sí era en verdad una cita a ciegas.

Yo sé que el Naproxeno, es un antiinflamatorio, que es una medicina muy fuerte que te cura muy rápido.
Ya casi sé lo mismo del Naproxeno que los médicos, alguien, desde mi infancia, me decía que las medicinas no son para jugar, aunque, si no fuera por mí, ya no tendríamos casa.
Aquel día en que encontré la la sartén en el fuego, si no fuera por lo que yo sé, se hubiera quemado todo.
Porque, cuando fui a la escuela, me explicaron que las cosas que se queman son inflamables; por eso, cuando yo vi que la cocina ardía, le eché un Naproxeno.

Una vez me contaron que las aguas del Mar Rojo se abrieron para dar paso a personas que huían, que una torre que debía llegar hasta el cielo dejó de construirse porque quienes la hacían dejaron de hablar la misma lengua, que un hombre salvó de un enorme diluvio a una pareja de cada especie de la Tierra, que alguien caminó sobre las aguas... Aunque nadie me contó que un día, gracias a una máquina, cualquier hombre de este planeta podría leer mis escritos, conversar conmigo desde lugares remotos.
Nadie me contó que una red invisible uniría al mundo.
Y la verdad, tampoco lo habría creído.

Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar en donde la soledad de éste domingo, sentía temor, aunque… Detrás de la pantalla, miles de ratones deciden mi futuro.

Andrea Guadalupe. 

sábado, enero 4

Quizás si regresas a casa conmigo… quizás

Enero 2014.           Quizás si regresas a casa conmigo… quizás 
Mil y una palabras al aire salieron de mi mente después de una breve pausa en mi corazón, juguetearon en mis manos antes de volar como mariposas, muchas de ellas se congelaron en los gélidos aires de la indiferencia, las demás siguieron su camino y llegaron a su destino, llevaban relatos de tiernas miradas y de cómo, estas, con el tiempo sin darnos cuenta, pierden su brillo.
Otras transitaron las sendas tratando de llegar a los sueños que están escondidos en las nubes, exploraron los abismos oscuros y tenebrosos donde reinan el miedo, los imposibles y los: No puedo.
Unas más, murieron sin darse cuenta de lo bellas que supieron ser, y mis preferidas, esas las deje conmigo…
Hoy sé que hay silencios incómodos que suenan como un despertador indicándonos que todo terminó, mutismos desgarradores que no caben en el pecho, porque el silencio es el lugar en donde la hondura profunda del sentido, es lo que nos hermana en medio de nuestros dolores, es esa tierra interior y común que nadie tiene en propiedad.
¿Quién va a escuchar mis silencios?
Ya me estoy quedando cada vez más muda, me lleno de silencios internos, abro mucho los ojos, trato de estar en todo y tomar apuntes con mi libreta a la que le queda una hoja y mi porta minas, sola, aprendiendo a caminar en silencio.
Quizá busque un café en algún local  si no está muy lleno.
Tengo que prepararme con furia al ritmo de Janis Joplin, la voz femenina más desgarradora del rock en su canción más depresiva: Cry baby, y soñar con un cambio de vida para después poner en pausa todos los pensamientos que no tengan nada que ver con estos sueños utópicos, que nublan mi mente.
Y sé que están ahí, rondándome, sólo que los despejo con un par de tazas de café y una buena dosis de voluntad para disponerme a empezar el día, aún sin terminar el anterior, sin tomar un descanso y caer rendida sin más que pensar, que en mirar en ambos sentidos las calles para no ser arrollada por un automovilista, o de concentrarme en la ruta, ya que invariablemente me voy del lado equivocado, y aclarar cómo exorcizar demonios, ya que ni leer, ni el trabajo, o escribir me ayudan.
¿Qué hace una cuando se queda con una mismo? ¿Sin historias que contar que no sean los insípidos y triviales problemas de un mundo con aires de telenovela barata?
Porque sólo yo puedo escuchar mis silencios, convivir con ellos y responderles cuando tenga la pregunta adecuada.
Tal vez… algunas melodías más alegres mejoren el inicio de la jornada, por ahora les dejo a la maravillosa Janis Joplin con su desgarrada voz, llena de sentimiento.
Quizás si regresas a casa conmigo… quizás  
Andrea Guadalupe.

Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar donde el tiempo pasa volando y los silencios siguen gritando tragedias.

viernes, enero 3

Que Dios los bendiga por…

Enero 2014.            Que Dios los bendiga por…
Hola Señor: ¿Cómo estás?
Hace mucho tiempo que deseaba escribirte una carta, aunque, por varias razones siempre la aplace, fundamentalmente por miedo, porque han hecho de ti un ídolo al cual hay que tenerle miedo.
Y el miedo que te tenía no me permitió  acercarme a ti, tratarte como a un amigo por el terror al pensar que tú me mandarías al infierno por faltarte el respeto y no temerte.
Sabes... Siento mucha pena por ti, me da una tristeza muy profunda al imaginar la culpabilidad que sentirías, si vivieras ahora en el planeta tierra.
En tu nombre se ha derramado más sangre que por cualquier otra causa.
Por tu nombre casi la mitad de la población del planeta ha vivido y vive en la esclavitud de la ignorancia.
Imagino lo fracasado que te debes sentir al ver lo que han hecho con tu mensaje, que es simple y hermoso...amar a los demás como a nosotr@s mism@s.
Contigo Señor, me han pasado cosas extrañas, he cambiado de opinión acerca de lo que tú eres realmente, he ido desde que tú eras el hijo de Dios, y hasta ahora, que creo que tú no eres ningún Dios o hijo de Dios, así como tampoco, salvador del mundo, ahora creo que tú eres igual que yo: Un ser humano que trato de ser feliz.
Hace ya un tiempo, te mande al diablo, me rebele de esa idea común de ti, que lo único que causa es miedo y esclavitud, y entonces al creer que lo importante es la vida, el ser humano y no los dioses...porque no existen, empecé a darme cuenta de que eso es precisamente de lo que tú hablas: de la libertad y del amor.
Tuve que liberarme de ti, rechazarte para poder llegar a encontrarte como amigo, como ser humano, al cual al igual que yo le pasaron muchas cosas y que trataste de destruir todo lo que esclaviza al ser.
Si te contara todo lo que se ha hecho en tu nombre...mejor no lo hago porque temo que te deprimirías mucho.
Estoy segura de que si vivieras algunos meses en la tierra ahora serias ateo.
Pienso que no podrías entender que por tu nombre haya grupos terroristas.
Te imagino si vivieras ahora yendo un domingo a misa y te sientas donde lo acostumbra la gente que van a lucir sus caras ropas o para auto-publicitarse como hombres y mujeres de una profunda vida espiritual.
Bueno, te imagino en la mitad de la misa parándote, despacio y en un momento de silencio, empiezas a hablar muy fuerte con palabras como estas...Gente estúpida e ignorante, sobretodo ustedes los sacerdotes.
Yo soy Jesús el Cristo: ¿Por qué han hecho de mi vida algo tan horrendo?
¿Por qué me hicieron un ídolo si precisamente mi vida la dedique a destruir los que pude encontrar?
¿Por qué han hecho de mi vida, que la dedique por entero a la causa de la libertad, un sinónimo de miseria y de esclavitud?
¿Por qué han hecho de mi nombre y de mi vida un sinónimo del miedo y la culpa, cuando lo único que trate de hacer fue decirle a la gente que dentro de un@ existe el poder para no temer y para vivir en paz y ser feliz?
Y en ese momento llega la policía y te saca de la iglesia y llevan detenido algunos días, aunque  después, te sueltan creyendo que eras un borracho loco de la calle, un loco urbano más.
Y así, el sacerdote dice...Hay que rezar más porque como ustedes ven, el diablo anda cerca.
Bueno, ahora sigamos con nuestra misa para honrar el nombre de Jesús el Cristo, y vamos a demostrar a Él, el Dios, cuanto le amamos.
Y lo vamos a hacer dando una muy buena cantidad a las personas que ahora van a pasar por sus asientos a pedir la colecta.
Demuéstrenle el amor que le tienen dando lo que más puedan de dinero.
Que Dios los bendiga por sus gestos de amor y de desprendimiento.
Te quiero mi amigo, siento mucho lo que paso con tu vida, aunque te agradezco que alguna vez hayas existido porque fuiste un ejemplo de coraje y de libertad.
Gracias, porque ahora, puedo entenderte y comprender que no existen los dioses sino que lo que existe es la energía divina de la vida.
Un abrazo Señor.

Andrea Guadalupe. 

jueves, enero 2

Hoy 02 de enero…

Enero 2014.          Hoy 02 de enero…
En nuestra cultura, contamos la vida en años.
Se fue el 2013, uno más o uno menos, según como movamos la línea del tiempo.
Para mí, la vida es una ecuación donde, luego de sumar y restar, el final es siempre una igualdad de ceros.
Me fascina el cero: el número redondo, el círculo vacío, la posibilidad de todo.
En mi infancia, pensaba que la palabra anuario se refería a guardar literalmente los años, aunque  no entendía muy bien cómo.
Ahora, sé que no estaba tan equivocada: los años se guardan en un armario de carne y hueso.
Y aunque la memoria lo olvide todo, el cuerpo no olvida, porque el cuerpo es el tiempo.
Creo que el significado tiempo, dándole un orden de inicio-fin: enero-diciembre nos obliga a reflexionar, sentir, expresar o comunicar algo en determinada fecha.
Por ejemplo, el fechar nuestro nacimiento nos fuerza a tratar de estar felices en día de nuestro cumpleaños.
Aunque resulta que la felicidad es multifactorial, pues muchas veces a la felicidad no se le da la gana manifestarse en mi cumpleaños.
 De forma similar, en fechas como la Navidad o año nuevo, la mercadotecnia nos solicita de la manera menos atenta que estemos alegres, sin importar las situaciones o circunstancias que vivamos; tenemos que estar alegres porque así lo marca el calendario.
Sólo que, coincide que una persona alegre/feliz, seguramente consume más que una que no lo está.
También, las dietas tienen que iniciarse en enero, como si las enfermedades nos perdonaran o nos dieran puntos a favor por iniciarlas en enero.
Imagino a la diabetes diciendo: ya te identifiqué, tienes niveles de glucosa por arriba de lo normal, aunque, como iniciaste tu dieta el primero de enero, pues te doy otra oportunidad y regreso a desgraciarte la vida hasta el 30 de Junio sin falta… ahí nos vemos.
También tenemos la clásica frase: empiezo a hacer ejercicio el lunes próximo.
¿Y por qué no el miércoles o jueves?, ¿será que si inicio el ejercicio a principio de semana quemaré más grasa?
Pues porque somos humanos, entrañables, tontos, entusiastas y testarud@s.
Me detengo y miro, no tiene nada de especial mi año y sin embargo sí: la impresión de que mi ordinaria existencia me pertenece muy poco.
La bendita certeza de que todo termina y no puedo hacer nada para impedirlo porque, gracias al Universo, no depende de mí.
Qué alivio saber que la vida no es para siempre; entender delante del cabello blanquizco que señala el espejo, del rostro en transformación constante y de las arrugas que se van profundizando, que sí, que somos temporales.
Entenderlo de verdad, con las células del cuerpo y no con las ideas.
Entonces me digo: si el tránsito de la vida es escandalosamente breve, esos propósitos de Año Nuevo son un verdadero disparate; bien mirados no son más que otra manifestación posmoderna del negocio de la bondad.
Permanecen por la idea millonaria de que todo lo que hacemos, comemos, aprendemos y vivimos nos induce a ser buenos o estar buen@s; vaya ironía.
¿De dónde vendrá el deseo apasionado de abrazar a la obligación temporal de bondad o de persona correcta?
Esas listas de inicio de año donde nos prometemos ser más flac@s, más atlétic@s, fumar menos, visitar más a la familia y ser mejores personas; las encuentro infantiles y mutiladoras.
Porque son listas para limitar, para no ser o para ser como la fórmula correcta dicta.
Vuelvo a detenerme y miro los doce meses de mi año 2013 y es una auténtica pasarela de la infamia porque desfilan delante de mí como entrañables monstruos: chuec@s, rot@s, gord@s, torcid@s, vicios@s, diferentes, fe@s.
Hermosamente tenues, libres incluso del peso de mi propia existencia, comprometid@s con la vida y nada más.
Porque ni enero ni diciembre dependen de mí y si muriera ahora mismo, ahí seguirían.
Y de nuevo me pregunto: ¿qué tiene que ver la vida con esas listas de propósitos pegadas en la puerta del refrigerador o en el block de notas digital?
Y la respuesta es nada, creo en pocas cosas, y entre ellas, en los finales de ciclo, pues comprendí que para cerrarlos, es necesario aprender a perdonar a aquellos que nos han hecho daño de una u otra manera, también de pedir perdón a quienes hemos dañado con nuestras actuaciones.
Así como agradecer de corazón lo que la vida y sus coprotagonistas nos han dado.
Perdonar y agradecer para poder decir adiós, sólo así es posible transitar, evolucionar, cambiar.
Creo en celebrar nuestra duración, nuestra existencia limitada y por lo mismo tremendamente maravillosa, y sobre todo, en volver a intentarlo.
Y para volver hay que irse, y siempre será admirable quien se atreve a hacerlo porque invariablemente, de allá a donde nos fuimos, regresamos siendo otr@s.
Por eso es que yo, me reconozco como progenitora responsable de mis finales, aunque también sé que los principios se irán modificando para vivir la vida con la dosis mínima posible de amargura y para no dejar que me coman las neurosis disfrazadas de falsas lealtades.
Hoy 02 de enero, hay un año nuevo de mirada húmeda, un año tierno, recién nacido: dejemos que sea.
Les deseo que este año los encuentre, no sólo con palabras de amor hinchándoles el pecho, que los hechos, hablen por nosotr@s.
Que nuestro anuario en el cuerpo baile, aunque a veces duela tener delante la certidumbre de los finales, total, si ya volvimos, volvamos a intentarlo, porque esto no tendría sentido sin estos intercambios que desbordan vitalidad.
Un abrazo. Feliz inicio de año.
Desde Tijuana BC, mi rincón existencial, lugar donde les deseo que cada quién, viva sus experiencias indecibles, imprescindibles, esas que nutren el espíritu, a las que hay que abandonarse con intensidad y delicadeza.

Andrea Guadalupe. 

miércoles, enero 1

Mis propósitos de año nuevo…

Enero 2014.                 Mis propósitos de año nuevo…
Ha terminado por fin el festín/bacanal/orgía o lo que sea que represente la época navideña.
Ya pasaron las bromas del día de los inocentes, y el día de los balazos, sinónimo de año nuevo.
Por lo que ahora comienza oficialmente la cruda de inicio de año.
Aunque… queda todavía un resabio de semejantes fechas: los  infumables, pútridos, insípidos y cursis propósitos de año nuevo.
Siempre me he preguntado: qué extraño proceso mental nos lleva a decir: Esté año voy a bajar de peso, cuando lo único que hacemos con el estómago es llevarlo a nuevos niveles de elasticidad, o conseguir un mejor trabajo, cuando ni trabajo hay.
Si ustedes me inundan con sus cartas cadena, fotos donde aparecen sus propósitos, yo exijo el derecho de mostrar la mía.
Mis propósitos de año nuevo serán: a) Lavar más seguido mi ropa. b) No quedarme solterona.
C) No morir sola y rodeada de mis 1099 4567 libros… Chin, chin si no lo logro, aunque, ahora que recuerdo, hubo otro propósito, no decir chin, chin, si no... Ups,  chin, chin si lo vuelvo a escribir.
Este año, me propongo ser la Emperadora con vestido esponjoso, corona y cetro...o algo similar con el único propósito de dedicarme a vagar por el mundo.
Seré una sensación que aplastará incluso a artistas de talla internacional como Paquita la del Barrio.
Hacer cosas trascendentales, como: Estar a favor de la vida virtual, para legalizar los abortos.
Escribiré un ensayo que cambie el rumbo de la literatura y que me hará quedar a la altura literaria de Corín Tellado.
Ya es momento de que nos vayamos civilizando un poco.
Patentaré la biblia y cobraré regalías por su uso a todas las iglesias cristianas del mundo.
Pensaba hacer lo mismo con el Corán, aunque parece que luego sus adeptos son medio extremos y te guardan rencor por algunos años.
Total, si ya los chinos patentaron la Virgen de Guadalupe.
Registraré y publicaré mi método para mirar lograr ver fijamente a una persona a los ojos durante una hora sin escuchar una sola palabra de lo que dice.
Crearé una fragancia tan buena, que en cuanto la huelan, se realizará un ritual orgiástico a mis pies.
Y hasta ahí, porque quiero darme el lujo de cumplir todos en estos 12 meses.
Estos propósitos están protegidos por una licencia de contenido libre.
Por lo que si se reproducen sin mi consentimiento, sus órganos reproductores serán mutilados.
Advertid@s están.

Andrea Guadalupe.