sábado, febrero 20

Y yo volaba entre ellas.

Tijuana BC Febrero /2010.         Y yo volaba entre ellas.

 

 

Jamás he creído que exista una sola realidad, lo supe, desde aquella vez.

Con seguridad que no hay realidad absoluta.  

Al menos no hay una sola.

Tampoco varias, ni puntos de vista diferentes… Deben existir tantas como estrellas en el universo,  un infinito, que son cifras que la mente no puede comprender, tal vez, si, los dioses que manejan los pensamientos de los seres humanos, sus títeres hechos con átomos ínfimos, solo hidrógeno, agua y carbón, pura electricidad y cortocircuitos.

Aparecieron mariposas… y yo volaba entre ellas.

Aunque no era una más, era algo inexplicable, como en los sueños, donde una ve todo, y oye y siente dolor o placer, sólo que no se ve a si misma.

Al mismo tiempo veía todo, en siete dimensiones, porque incluso todo era concreto, y opaco, y también transparente y al mismo tiempo se podía penetrar una a la otra.

Y cuando llena de asombro, estaba tratando de entender esa singular realidad, apareció ella.

 Y me vio de lejos y me sonrió.

Y yo le sonreí, y su sonrisa era pura, cálida, como una niñita de un año, cuando es pura su alma, inmune a la maldad.

Y volamos, en infinitas dimensiones, y apenas tal vez nos rozamos, y lo disfrutábamos, como nadie podría explicármelo, aunque supe que era eso, lo que supera a lo perfecto, quizá a los infinitos…o que llega de maravilla, a ser absurdo.

Y no volvimos a encontrarnos…

Quedó guardado en mis universos, no paralelos, ni armónicos, si  agradables y compartidos… Nunca sabré su nombre, si lo tiene, como tampoco nunca sabré si todo fue un juego de los dioses, sólo que era tan dulce y agrio, como el amor que fue y no fue y es y no es más.

Andrea Guadalupe.

 

 

 


 



                                              Andrea Guadalupe.

                Tijuana BC. México. Tierra que abraza siempre al regreso, que cobija entre latidos  
                                            sumergidos en una busqueda natural.

                   Desde mi rincón existencial, donde el  sol nace al poniente.      

 
 




En Messenger están mis contactos con los que sí tengo contacto

No hay comentarios.: